RESEÑA ESCRITO EN TU PIEL

ESCRITO EN TU PIEL,
Meredith Duran

Meredith Duran nos trae con Escrito en tu piel la segunda entrega de Armas de mujer, siendo esta novela un punto y aparte, al ser dos historias totalmente distintas, con distintos personajes y que no sigue de ninguna forma a la primera.


En esta entrega, los protagonisas son Phin y Mina. Él se hace pasar por hombre de negocios siendo en realidad un espía al estilo de James Bond pero en el año 1880 y con todo el glamour de un caballero inglés. Mina es hijastra de un hombre despiadado que además de dedicarse a sus negocios en Hong Kong, trafica con otras mercancías y además maltrata a la madre de la joven.


Durante un baile, Phin se queda para contemplar el arresto de Gerard Collins, el padrastro, sabiendo que debería irse y que no lo encontrasen allí. Tras una copa de brandy sale al exterior, perseguido por la joven y alocada Mina. Se besan y ella le pide un baile. Entonces él termina en el suelo. Lo han envenenado. ¿Quién ha podido traicionarle? ¿Quién sabía en realidad a qué se dedicaba? Mina lo lleva a su casa y tras descubrir que es un espía se arriesga y le salva la vida ayudándolo a escapar.


Cuatro años después, en Londres, Phin se ha convertido en un aristócrata al heredar un título. Mina se encuentra “casi secuestrada”, pues está recluida en una de las habitaciones de la casa de Ridland, curiosamente el antiguo jefe de Phineas Monroe, en realidad Phineas Granville. Al parecer su madre, ha vuelto con Collins, aunque su hija tiene clarísimo que eso es un disparate y que ninguna manera su madre habría vuelto con tremenda bestia. Cuatro años antes, su padrastro había escapado de las zarpas de los policías y ahora se hallaba en paradero desconocido. Mina, le pide a Ridland que avise a Phin, y éste lo hace, aunque no de buena gana, al negarse ella a colaborar si él no aparece. Y cuando lo hace ambos se encontrarán inmersos en una espiral de engaños y traiciones.


Una lectura interesante para los amantes del género romántico. Con mucho encanto, educación inglesa y pasión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario